A día de hoy, el cómic ha entrado en las librerías, bibliotecas y en la vida de las personas que ya eran lectoras de este tipo de literatura…y en las que no.
Hemos vivido un boom donde ha pasado de ser un tipo de literatura que solo leían unos/as pocos/as (por lo menos en España), a ser un fenómeno de masas.
La diversidad de propuestas de cómics y novelas gráficas es abrumadora: históricas, fantásticas, románticas, etc.
Por lo tanto, tenemos una oportunidad de tener un producto más para comunicar y que llegue a las personas. Y no es un producto cualquiera – es la base de otras muchas cosas que realizamos – por ejemplo, ¿sabías que antes de realizar un vídeo se realiza un storyboard que visualmente se parece mucho a un cómic?
En nuestro caso, es un formato que funciona muy bien, ya que integra tanto elementos visuales (ilustraciones) con elementos gráficos (palabras) y como muchos ya sabréis, es la base del Visual Thinking.
Igualmente es una técnica que requiere su aprendizaje y nosotras hemos podido aprender algo de este noveno arte en nuestra escuela Esdip.
Al final, uno de los súper poderes del cómic es que podemos crear personajes, historias y narrativas. Eso permite que los lectores empaticen mucho más que con otro tipo de contenido, como puede ser una infografía o un comunicado.


No se trata de que sea mejor usar una cosa u otra, se trata de hacernos algunas preguntas antes de elegir el mejor producto:
- ¿Qué quiero conseguir con mi comunicado?
- ¿Quiénes somos y cómo queremos comunicar?
- ¿Quién va a leer mi comunicado?
- Y por tanto ¿cuál es mi mejor producto para comunicar?
Hace 4 meses, la Confederación de Salud Mental nos pidió que participáramos con ellas en su programa “Descubre, no bloquees tu salud mental”. El objetivo del programa es «sensibilizar sobre la relación entre conductas de riesgo, como el consumo de drogas y otras adicciones y el desarrollo de problemas de salud mental». Esta enfocado sobre todo a gente joven, por lo que nuestra propuesta fue utilizar el cómic. De ahí, surgieron dos cómics cortos. En ellos, narramos las historias de dos personajes inspirados en experiencias de personas que nos narraron sus vivencias en primera persona.


Podéis investigar más de este proyecto en este enlace.
En este caso tuvimos en cuenta qué se quería conseguir, cómo quería comunicar la Confederación y quién iba a recibir nuestro producto. Estaba claro que el cómic era muy buena vía para empatizar con estos chavales/as.
En nuestro caso, nos gusta mucho levantar la mirada e indagar en posibilidades diferentes, productos distintos y caminos poco transitados con el objetivo de comunicar más y mejor. 🙂
Deja una respuesta